Ayer fui al dentista a la revisión anual rutinaria. Como siempre, me encontró un par de caries, pero como eran pequeñas y en el mismo lado (una arriba y otra abajo) me dijo que si me ponía anestesia solo podía hacer un empaste y tendría que volver otro día a empastar la otra (parece ser que al dormir los dos lados puedes partirte la mandíbula sin darte cuenta).
Me dio la opción (no me hace mucha gracia ir varias veces al dentista, porque es muy bueno ~por eso no he dejado de ir~ pero cada vez que vas lo menos que tardas en salir son dos horas largas) de empastar sin anestesia, que podíamos probar. Y ahí me tenéis, con más miedo que un pavo en navidad, dispuesto a enfrentarme al torno sin anestesia... y como ya he dicho que el dentista es muy bueno, la verdad es que molesto fue pero no sentí dolor alguno. De hecho, la limpieza fue bastante más pesada, dolorosa y molesta que los dos empastes.
Nunca pensé que fuera posible empastar sin dolor.
Jejeje, acabo de descubrir que tienes un pequeño blog, así que yo también te fisgaré de vez en cuando.
ResponderEliminarY por si no sabes quién soy... Hola, hace algunos años yo también pertenecí a una asociación de Getafe, aunque mis aportaciones fueron más ocasionales que otra cosa. Hoy en día ando totalmente desvinculado de ella, pero me podéis encontrar en una ciudad llamada Ciudad Real :)
Me alegra "mazo" leerte por aqui. XDDD
ResponderEliminarIgual algún día deberíamos hacer una quedada de "exsocios de NeoAtlantis" en plan "alcoholicos anónimos"; podría quedar curioso XP.
Y eres libre de fisgar lo que quieras, que para eso esta el blog.... creo.